Testimonio del grupo de Confirmación de Montevideo
El sábado 14 de mayo recibieron el sacramento de la Confirmación diez alumnos y exalumnos de Montevideo, junto a dos jóvenes de la Parroquia Ntra. Sra. de los Dolores (Reducto). Además, uno de los confirmandos recibió el Bautismo y dos la Primera Comunión. Ahora han sido invitados continuar su compromiso de fe por medio del grupo misionero Cor Jesu de Uruguay. A continuación, compartimos el testimonio que ellos mismos prepararon y compartieron durante la celebración.
En marzo de 2021 cada uno de nosotros nos unimos a este camino sin saber que esperar, sin ninguna expectativa y sin darnos cuenta en lo que se iba a transformar. Al principio, compartir nuestra vida con gente extraña o poco conocida se hacía difícil y generaba cierta desconfianza, pero, finalmente, esto termino convirtiéndose en lo que tomaba más tiempo de nuestras reuniones y más disfrutábamos, y no porque estuviera acompañado de una “merienda continental” sino porque pasamos de contar “lo mejor” de nuestra semana a la semana entera, confiándonos lo bueno, pero también lo malo.
Luego de esto venía la parte de trabajar con la Biblia la cual, en un principio, no a todos nos entusiasmaba ya que no todos lo vivíamos igual. Pero, gracias a nuestros referentes que nos ponían ejemplos de la vida cotidiana, lográbamos ver las situaciones un poco más claras, llegábamos a entenderlas y sentir que eran situaciones conocidas, porque las habíamos vivido o las estábamos viviendo.
Gran parte de nuestro recorrido lo hicimos de la mano de Juli y del Hno. Emilio, quienes, además de guiarnos en este camino, nos permitieron conocerlos de una forma más cercana compartiendo también ellos lo mejor y lo peor de sus semanas. Ellos fueron los que, con mucha paciencia y llenos de amor, fueron ayudándonos en este camino de fe, el cual, como cualquier otro, no fue perfecto. Todos y cada uno de nosotros tuvimos altibajos, días en los cuales sentíamos que nada tenía sentido y a Dios muy lejano, pero esto no eran más que simples piedras en el camino, que pudimos superar y salir a delante de la mano de Dios.
En abril tuvimos una convivencia o retiro junto a los compañeros del grupo misionero, y fue una de las experiencias más inolvidables. Fue una luz, nos abrió los ojos y nos hizo darnos cuenta de que este era nuestro camino. Conocimos gente a la cual sólo teníamos de vista y fuimos más allá de lo superficial de las personas: conocimos su interior y eso también nos hizo estar más cerca de Dios.
Nos queda agradecerle a Dios por todo lo que nos ha dado, agradecerle por guiarnos, por las personas que nos acompañaron en este camino, ya sean los “confiamigos”, los referentes o los padrinos y madrinas; agradecer por nuestras familias, por el colegio y todas las personas que han estado en este proceso tan importante para nosotros. Te damos gracias, Señor, por la presencia en nuestro grupo de Nathalia y Mateo que, si bien hoy no se confirman con nosotros, los sentimos hermanos.
Gracias Dios por estar siempre, por nunca abandonarnos en los peores momentos y, más que nada, por mostrarnos que la fe se vive en comunidad y, fundamentalmente, recordarnos que nuestro camino no termina acá, al contrario, esto recién empieza.
Grupo de confirmación 2021/2022 de Montevideo
Commentaires